¿Quién es el autor?
Existen posturas diferentes en cuanto a las inteligencias artificiales y el arte.
Una mirada optimista como la de Marcus du Sautoy, matemático de Oxford que explora cómo la IA está cambiando la música, el arte visual, la literatura y las matemáticas, plantea que debemos entender a la IA como un socio creativo o como una herramienta para extender nuestra propia creatividad. Explica también que puede ayudar al mismo tiempo a que los artistas se comporten menos como máquinas y más como humanos creativos.
"Algunos humanos creativos están felices de que la IA se una al mundo del arte. Lo ven no como un intruso amenazador, sino como un colaborador potencial que puede sacarlos de sus rutinas habituales y alentarlos a pensar en nuevas direcciones."
Sin embargo, algunas otras posturas plantean que entenderlo de aquella forma implicaría un cambio de paradigma, de la creatividad artística como algo solo humano al de una creatividad artística atravesada por la artificialidad. Richard Lloyd, especialista de la casa de subastas Christie, se pregunta quién es el responsable de la creación de una pieza creada con IA y cuál es su lugar creativo. ¿Es el algoritmo? ¿Es el programador que lo desarrolló y escribió?
“El trabajo artístico representa cuestiones más fundamentales en torno a la agencia creativa.”
Ejemplos como The New Rembrandt, obra creada por una IA, no son más que representaciones de la creatividad humana, ya que están basadas en el estilo pictórico de un autor previo.
Algunos críticos hablan de carencia de personalidad. Otros expertos se sorprenden del resultado logrado. Un algoritmo de reconocimiento facial combinado con software de aprendizaje profundo rastreo 168.263 fragmentos de 346 pinturas de Rembrandt. Luego con los datos extraídos y procesados una impresora 3D generó una obra inédita.
Cruzando los límites entre el arte y la tecnología para traer a la vida nuevamente el aura de Rembrandt.
Cómo fue el proceso.